La obra, con un éxito inmediato y multitud de ediciones y traducciones, es un relato en primera persona y en forma epistolar de la vida y muerte del emperador romano Adriano.
Dirigiéndose a su sucesor, Marco Aurelio, a quien había adoptado como nieto, y con una elegancia prosaica y un lenguaje sublime, el emperador reflexiona con nostalgia sobre su reinado, los triunfos militares, el amor, la amistad, la muerte y el arte.
Marguerite Yourcenar nos deleita con una novela histórica singular escrita con un tono poético, a caballo entre la ficción y la biografía, con la que lleva al lector hasta el centro de poder de la época.