No parece posible elaborar una lista de los mejores libros de todos los tiempos que no sea polémica y, en cierto modo, injusta. Entre los versos milenarios de Gilgamesh y el realismo mágico de García Márquez existe un enorme océano de literatura que contiene todo lo imaginable y que resulta casi imposible reducir a un centenar de títulos. Pero eso no quiere decir que no pueda intentarse…
En 2002, el Club del Libro Noruego elaboró una lista de libros de la literatura universal esenciales a partir de las propuestas de cien escritores de cincuenta y cuatro países. Aquí te presentamos el recorrido íntegro a través de las obras que propone esa lista. Un apasionante viaje que arranca en la Mesopotamia de hace cuatro mil años, continúa con clásicos griegos como Homero y Sófocles y alcanza los inmortales latines de Virgilio y Ovidio tras pasar por el Mahabhárata y el Ramayana indios.
Siglos más adelante, las fantásticas recopilaciones de las Mil y una noches, los cuentos de Chaucer y la inspiración de Dante darán paso, ya en la Edad Moderna, a la increíble fecundidad de Shakespeare y a ese libro fundacional que fue el Quijote. Saltando de Swift a Sterne llegamos a la oscuridad de Poe, el romanticismo de Goethe y el talento arrollador de Balzac. También a los cantos cósmicos de Whitman, el universo de Dickens y los recovecos del alma alcanzados por Dostoievski.
El siglo XX es casi una historia aparte dentro de los que ya se pueden llamar libros de literatura clásica. Franz Kafka dinamitó los viejos esquemas junto a Proust y Joyce, Céline aportó su prosa brillante y despiadada y Borges reunió erudición y fantasía en una obra única. Pero también trajo el siglo lecturas tan gozosas como el Zorba de Nikos Kazantzakis, tan polémicas como la Lolita de Nabokov y tan deslumbrantes como el ¡Absalón, Absalón! de William Faulkner.
Te espera, en suma, una aventura vertiginosa que celebra el esfuerzo y el genio de la especie humana para crear historias que leer en torno al fuego, analizar en las cátedras o recordar la noche anterior a una batalla. Por eso los textos contenidos en los 100 libros que debes leer lo cubren todo, de lo espeluznante a lo insondable, de lo luminoso a lo oscuro y de lo profundo a lo efervescente. Los registros son innumerables y las recompensas de quienes lean también lo serán.
Quizá cada lector deba hacer su propia lista de los mejores libros del mundo, pero en la que te ofrecemos aquí hay, sin duda, todo un caudal literario que te abrirá las puertas de muchas de las más asombrosas obras jamás escritas en cualquier lengua, en cualquier lugar y en cualquier tiempo.
Novelas
No resulta extraño que buena parte de la literatura más prestigiosa esté ocupada por las novelas. Con frecuencia se dice que ese es el género literario por excelencia, aunque en tiempos de Cervantes, paradójicamente, no tenía tal consideración. Hoy nadie discute que muchas de las cumbres de las letras han sido alcanzadas por novelistas de la dimensión de Honoré de Balzac, Lev Tolstói, Robert Musil, Italo Svevo, Virginia Woolf o William Faulkner. Son algunos de los abanderados de un género libre y de perfiles difícilmente definibles, que en los siglos XIX y XX llegó a su verdadera madurez renovando y enriqueciendo sus planteamientos y recursos hasta extremos asombrosos. Entre las mejores novelas, recomendadas y recomendables sin reservas, están títulos como estos:
- Rojo y negro, de Stendhal
- Cumbres borrascosas, de Emily Brontë
- La montaña mágica, de Thomas Mann
- Zorba el griego, de Nikos Kazantzakis
- El tambor de hojalata, de Günter Grass
Relatos cortos
El cuento tiene una antiquísima tradición oral que, al menos parcialmente, ha sido recogida en recopilaciones como Las mil y una noches. Si a sus ensueños orientales unimos los Cuentos de Canterbury, de Geoffrey Chaucer, y el Decamerón, de Bocaccio, tendremos una fascinante muestra de los relatos medievales que han servido de referencia para la posterior evolución del género. Antón Chéjov sería uno de los nombres propios de esa evolución, pero el cuento tradicional se vio reinventado en el siglo XX por personalidades tan singulares como las de Kafka o Borges, autores de muchos de los mejores relatos cortos de la historia.
Cualquier lista que pretenda reunir los cuentos más memorables que se han escrito no debería prescindir, en ningún caso, de las obras que siguen:
- Diario de un loco, de Lu Xun
- Cuentos completos, de Edgar Allan Poe
- Ficciones, de Jorge Luis Borges
- Cuentos infantiles, de Hans Christian Andersen
Poesía
En tiempos remotos, la poesía y la música eran casi una misma cosa y la rima ayudaba a recordar las historias narradas oralmente. No es casualidad, así, que obras de tanta antigüedad como la epopeya de Gilgamesh o las épicas aventuras de Homero adoptasen la forma de largos poemas. Con el transcurso de los siglos, la poesía pasó por las manos de juglares, místicos y autores de diferente condición, y mudó su papel para acabar convirtiéndose en una forma de expresión genuinamente individual. Walt Whitman es una de las grandes voces poéticas del XIX, y a él le dedicará una oda Federico García Lorca, autor de referencia en la primera mitad de la centuria siguiente. Pero entre los más brillantes libros de poesía hay espacio para muchas otras épocas y sensibilidades, y para obras tan heterogéneas como estas:
- Poemas, de Paul Celan
- Divina Comedia, de Dante Alighieri
- Poesías, de Giacomo Leopardi
- Ramayana, de Valmiki
Teatro
Hace casi dos mil quinientos años que los griegos sentaron las bases del teatro clásico con sus actos, su escenografía y su público dispuesto en semicírculo. Los venerables Sófocles y Eurípides fueron imitados por los autores romanos, pero el arte teatral atravesaría durante el Medievo largas épocas de letargo. Estaba por llegar la explosión del Siglo de Oro español y la figura universal de William Shakespeare, que representó sus obras en el emblemático Globe. En el XIX, Goethe haría su aportación a la escena recreando el mito de Fausto, y después vendría el siglo XX con sus ansias de romper el lenguaje artístico en casi todas sus manifestaciones. Brecht, Becket o Miller se sumarían entonces a la lista de autores relevantes en un género que ha dado piezas maestras entre la que, indudablemente, están las siguientes:
- Edipo Rey, de Sófocles
- Medea, de Eurípides
- El rey Lear, de Shakespeare
- Casa de muñecas, de Ibsen

Las novelas imprescindibles
Entre los libros recomendados, las novelas suelen ocupar un lugar preferente; y aunque hoy está relativamente claro el concepto de género novelístico, sobre su origen se ha debatido largo y tendido. Aceptando que se trata de una narración en prosa y con cierta extensión se han buscado precedentes en la Edad Antigua, pero tanto la epopeya de Gilgamesh como los relatos homéricos y sus equivalentes latinos adoptaron la forma versificada al ser escritos.
Aunque en tiempos del Imperio romano sí aparecen obras en prosa como el Satiricón, muchos adjudican la condición de primera novela de la historia a Genji monogatari, de la japonesa Murasaki Shikibu. Pertenece ya al siglo XI, y en Occidente habrá que esperar un poco más para que se desarrolle y popularice la novela caballeresca de la mano de la materia artúrica. Por otro lado, el Decamerón y los Cuentos de Canterbury también se pueden considerar novelas tempranas, al unir una colección de historias con un hilo conductor.
La Edad Media termina mientras se inventa la imprenta y se hacen populares los libros de caballerías. Al parodiarlos, Cervantes crea con Don Quijote de la Mancha la primera novela moderna y da un golpe de timón a la historia literaria. El Tristram Shandy de Sterne, ya en el XVIII, avanzará en la experimentación formal y abrirá nuevas puertas que serán aprovechadas por los autores decimonónicos. Es el turno de los franceses Stendhal, Flaubert y Balzac, y de la novela romántica de las hermanas Brönte. Pero también de las historias por entregas como Grandes esperanzas y de los relatos de Poe que anuncian el futuro género policíaco. Ambas aportaciones no solo forman hoy parte de las novelas clásicas, sino también de las novelas recomendadas para leer, en general, por cualquier tipo de público.
El siglo XX llega precedido por la profundidad psicológica de Crimen y castigo y el Huckleberry Finn de Twain, otra de las novelas recomendadas con más frecuencia. La terrible primera mitad de la centuria generará el derribo de nuevas barreras novelísticas con el Ulises de Joyce o En busca del tiempo perdido de Proust. No sin dificultades se abrirá también camino la novela existencialista de Camus y el testimonio de la llamada generación perdida estadounidense, a la que pertenecen figuras tan relevantes como Hemingway o Faulkner.
El Premio Nobel de Literatura, cuyo nacimiento casi coincide con el del siglo, reconocerá algunas de las tendencias más fructíferas del período, como el realismo mágico que simboliza Cien años de soledad. Pero también olvidará a francotiradores como Céline o creadores de la dimensión de Torrente Ballester. Sea como sea, el género sobrevive a los tiempos por su naturaleza multiforme y continúa produciendo obras maestras que añadir a la larga lista que el siglo pasado nos dejó. Cuáles son las mejores novelas para leer es una pregunta complicada, pero aquí intentaremos ofrecerte muchas de las que, sin duda, valen de verdad la pena.
A menudo, la expresión literaria da como resultado textos que escapan a los márgenes de los géneros o pertenecen simultáneamente a varios de ellos. Entre esas obras heterogéneas existen no pocas joyas de la historia de la literatura.